La Ventana por Luz Pacheco.
La Ventana
Había estado ocupada los últimos meses preparando la casa para el invitado, preparándose para el invitado.
Se había esforzado en limpiar y cambiar el color de las paredes. sustituyó cosas viejas por cosas nuevas.
Decoró los rincones más visibles y los que no se veían tanto, se fijó en los detalles. Mejoró, para hacerla más cálida, la iluminación. Compró , colocó y encendió velas.
Para mejorar el aire en el interior colocó plantas, jarrones con flores, que harían que también se viese mejor desde fuera.
Había estado ocupada y no se dio cuenta. Pero ahora sentía el aire cargado allí y sin duda la iluminación no era suficiente o no era la adecuada porque no conseguía la claridad que deseaba y empezaba a extrañar la luz que antes tenía su casa.
Por más que intentó ignorarlo tuvo que buscar y miró desde todas las direcciones y ángulos, hasta que la encontró.
¿Esa ventana?
Recordó ahora claramente cuando la descubrió y cuánto le costó abrirla. Era pequeña y no daba , aparentemente a ningún rincón especial, ningún jardín esperaba tras aquellos sucios cristales, pero aun así le dedicó tiempo y amor, no fue fácil pero consiguió abrirla. No podía entender como había olvidado aquella pequeña ventana.
Así que volvió a abrirla, la ventana no la había olvidado a ella, no obstante, y sólo necesito dedicarle toda su atención, puso toda su energía.
Y allí estaba de nuevo , toda la luz contenida , aquella ráfaga de aire fresco que recorrió su casa y tiró al suelo todo lo que con esmero había colocado.
Luz Pacheco