Ser una Persona Altamente Sensible significa sentir todo con mucha intensidad, así que lo externo afecta demasiado. La gran empatía que tiene, a veces, le hace sufrir más, tendiendo a sentirse frustrada. Se cansa delante de tanto estímulo y es entonces cuando tiende a la soledad; la cual le va a regalar un alivio, ya que su exhaustiva observación y la intensidad con la que llega a percibir, le agota.
Le gusta hablar sobre sentimientos, le encanta ayudar y es muy solidaria. Conecta a la perfección con animales, plantas y le es fácil entrar en otros planos de consciencia.
Si se siente frustrada sufre más, porque le duele demasiado la crítica y el rechazo, hasta el punto de desarrollar una personalidad casi obsesiva.
Tal vez al leer esto sospeches de tener características P.A.S., o que alguien de tu alrededor lo sea. Si es así, lo mejor es reconocerse, o reconocerle, como tal, porque entonces se pueden entender muchos comportamientos, muchos momentos. Y, sobre todo, nos damos cuenta de que es tan sensible que se siente atacada fácilmente, y no por eso es “rara”, o “le pasa algo”. Simplemente, su forma de estar en este plano es otra. Solamente debemos aprender a tratarla diferente, a saber sostenerla, porque la sensibilidad de esta persona es la que nos ayuda como Humanidad a ver las cosas desde otro punto de vista, más energético, más amoroso, más cariñoso y empático.
A veces, en consulta, llega alguien disfrazando su alta sensibilidad con una careta de obsesión o incluso depresión. A lo largo del trabajo personal con ella y siguiendo su camino de sanación, hemos logrado descubrir juntas como detrás de esos síntomas hay escondida un Alma muy creativa y sensible que está deseando expresarse y ver la Luz.Si tienes dudas de serlo no dudes en contactarme porque podemos averiguar qué bloqueos mentales no te dejan ser quien realmente eres y vivir tu vida de libertad y plenitud.